¿Fatiga visual o vista cansada? Síntomas y cómo diferenciarlos
Debido a nuestra forma y estilo de vida actual, donde nuestros ojos están expuestos permanentemente a pantallas, estímulos visuales y estrés, es normal sufrir de fatiga visual.
Este es un problema común que puede provocar diferentes síntomas, entre los más habituales la irritación de ojos, sequedad o dolor de cabeza. Cuidar de nuestra salud ocular es más importante que nunca.
Sin embargo, en ocasiones la fatiga visual puede confundirse con vista cansada o presbicia, una anomalía ocular que se produce a causa de la edad y que produce síntomas muy similares a los de la fatiga ocular. ¿No estás muy seguro de cuál es la diferencia entre fatiga visual y vista cansada? A continuación, te contamos todos los detalles.
¿Qué es la fatiga visual?
La fatiga visual o astenopia se produce a causa de un sobreesfuerzo de nuestros ojos durante largos periodos de tiempo. Actualmente muchos de nosotros la sufrimos a causa del uso intensivo de las pantallas, pues de media, los adultos de menos de 30 años pueden pasar hasta 10 horas y media al día frente a una pantalla u otros dispositivos móviles.
Las consecuencias de una alta actividad ocular centrada en un foco concreto, la falta de luz o los cambios de foco constantes, unido a la falta de cuidado de nuestros ojos, puede provocar distintos síntomas: desde picor, enrojecimiento, irritación o sensación de arenilla hasta dolor de cabeza o incluso visión borrosa.
¿Qué es la vista cansada?
Por otro lado, la vista cansada se conoce también por el término científico-médico de presbicia. Esta se trata de una anomalía degenerativa que aparece cuando el cristalino ocular envejece a causa del paso del tiempo perdiendo la capacidad de acomodación. Se suele desarrollar a partir de los 40–45 años y casi un 50% de la población española padece de vista cansada. El porcentaje aumenta hasta el 80% a partir de los 55 años.
Los síntomas de la vista cansada son bastante evidentes: tener que alejar lo que queremos leer o alargar el brazo para facilitar su lectura, visión borrosa, pesadez en los ojos o una falta de nitidez constante durante las actividades normales del día a día, sobre todo en el uso de pantallas o la lectura. Si no se pone solución, es habitual sufrir dolores de cabeza, sensibilidad a la luz, ardor, ojos llorosos, sequedad o hinchazón.
¿Cuáles son los síntomas comunes y las diferencias clave?
Como puedes ver, la fatiga visual y la vista cansada tienen síntomas muy similares: el dolor de cabeza, la visión borrosa, la irritación… Por eso es bastante sencillo confundir estos dos síntomas oculares. No obstante, las diferencias son también fáciles de identificar.
La clave está en que, por un lado, la fatiga ocular se desarrolla de forma momentánea y a causa de un sobreesfuerzo puntual. La solución para que desaparezcan los síntomas es sencilla: descansar la vista y adoptar hábitos más saludables en higiene visual. De todas formas, sufrir fatiga visual de forma continuada puede acelerar el envejecimiento del ojo y aumentar las posibilidades de sufrir de presbicia u otras anomalías oculares en edades más tempranas.
Por otro lado, la vista cansada es una anomalía que se desarrolla de manera progresiva a medida que envejecemos. Los síntomas pueden aparecer y desaparecer constantemente, pero la falta de nitidez visual o visión más borrosa es permanente y progresiva. Además, la vista cansada puede provocar fatiga visual de forma continuada, y si no ponemos solución, la presbicia y sus síntomas irán empeorando con el paso del tiempo.
Ejemplo de situación: fatiga visual vs. vista cansada
Imagina que una persona joven está en la oficina y que tras 5 horas de trabajo intenso delante de la pantalla empieza a dolerle la cabeza y nota cierto picor en los ojos. Decide parar un rato para descansar, tomar el aire, beber agua, lavarse la cara, comer algo y tomarse un paracetamol. Tras media hora, todo vuelve a la normalidad y puede volver a sus tareas. Esto sería un claro ejemplo de fatiga visual, un problema puntual causado por el sobreesfuerzo ocular.
Ahora, imagina la misma situación, pero de tal forma que los síntomas aparecen en un hombre de 45 años. Además de ser más permanentes y constantes, los síntomas aparecen al poco de sentarse en la silla de la oficina. La visión borrosa, sobre todo en la visión cercana e intermedia, no desaparece, y el dolor de cabeza se presenta habitualmente. Factores como la edad, síntomas constantes y aumento de la fatiga ocular nos hacen pensar que sufre de vista cansada.
Diagnóstico y tratamientos para la vista cansada
Como ya hemos comentado, la fatiga visual puede reducirse y hacerse desaparecer a través del descanso y una mejora de la higiene ocular. Sin embargo, una vez la presbicia hace su primera aparición, no desaparece de forma natural. Es decir, es necesario acudir a un optometrista para hacer una revisión ocular y comprobar cuál puede ser la solución más efectiva.
Una primera opción es el uso de gafas para vista cansada homologadas o de lectura, ya que se trata de una manera sencilla de recuperar una visión nítida y reducir significativamente los síntomas. Otra opción cada vez más habitual son las gafas progresivas, una solución que permite corregir la visión tanto de cerca e intermedia como de lejos, gracias al uso de cristales que permiten enfocar a diferentes distancias configurando las dioptrías correctas para cada caso de uso.
De la misma forma, también se puede optar por las lentes de contacto progresivas o multifocales. Estas ofrecen una mayor comodidad visual en el día a día, así como una mejor adaptación a ciertas situaciones y actividades.
10 Recomendaciones para mejorar tu salud visual
Además de las soluciones comentadas, la recomendación por parte de los expertos es adoptar hábitos saludables que nos permitan cuidar nuestra salud visual. A continuación, te ofrecemos 10 consejos que pueden ayudarte a evitar la fatiga visual y reducir las posibilidades de desarrollar presbicia temprana. E incluso si ya padeces de vista cansada, estos consejos también son útiles para frenar su desarrollo y evitar otros problemas asociados.
1. Mantén la distancia correcta
Para los portátiles y ordenadores la distancia es la del brazo extendido. Para una tablet la distancia es la misma que para leer un libro (ángulo de brazo 90º).
2. Regula la altura de la pantalla
La parte superior debe quedar a la altura de tus ojos. Sitúa los materiales de trabajo o estudio a una distancia similar para evitar cambios de enfoque continuos.
3. Ajusta el contraste y el brillo
Para no forzar la vista reduce el brillo al mínimo. Pon un tamaño de caracteres con el que puedas trabajar cómodamente.
4. Dales un descanso a tus ojos
Haz pausas periódicas para evitar la fatiga visual. Es recomendable seguir la regla 20/20/20: cada 20 minutos haz un break de 20 segundos mirando objetos lejanos a más de 20 metros.
5. Una buena iluminación ayuda
Evita entornos oscuros o con poca luz. La iluminación general no debe incidir directamente sobre los ojos ni crear reflejos en la pantalla.
6. Hidrata tus ojos
Es necesario mantener una buena lágrima que reduzca las molestias por sequedad. Puedes utilizar como lubricante ocular lágrimas artificiales.
7. Usa un filtro azul
Este filtro optimiza el contraste con el que percibimos las imágenes y bloquea la porción de espectro de luz que transmite más energía. Puedes incorporarlo a tus gafas graduadas.
8. Ejercicios oculares
Ante la fatiga visual evita la tentación de frotarte los ojos. Prueba a parpadear con frecuencia. También son de ayuda los guiños que fortalecen la musculatura ocular, o dar un masaje muy suave sobre los párpados durante unos segundos.
9. Duerme bien
El descanso es un excelente aliado de nuestra vista. Dormir entre 6/8 horas ayuda a que nuestra visión esté en plena forma.
10. La alimentación es clave
Bebe agua y consume alimentos ricos en omega 3, como el pescado azul, aceite de oliva y frutos secos.
Esperamos que hayas comprendido cuáles son las diferencias entre fatiga visual y vista cansada, así como la importancia de cuidar nuestros ojos para evitar y frenar la aparición de problemas como este. No obstante, ante cualquier duda lo mejor es consultar con un profesional que pueda ayudarte a encontrar el diagnóstico correcto.
Por este motivo te invitamos a visitar tu tienda de Optica2000 más cercana. Pide tu cita a través de nuestra web y uno de nuestros óptico-optometristas te realizará una revisión ocular gratuita y sin compromiso. Tras realizar las pruebas pertinentes, nuestro equipo te ayudará a encontrar la mejor solución para tus problemas de visión. ¡Te estamos esperando!